El perro puede justificar una o cuantas veces se lo requiera de porqué es el inseparable amigo del hombre desde hace miles de años, como así también puede demostrar "el porqué" el hombre debe permanentemente recurrir al él como principal e irreemplazable colaborador.
El caso de los "perros de rescate" son el ejemplo ideal de éstos conceptos, debido por ejemplo a que, en caso de terremotos, explosiones, o cualquier accidente que produciera un derrumbe de escombros, de nada servirían los esfuerzos realizados por muchas personas si éstas no tuvieran a su lado a su verdadero héroe: "El perro de escombros".
El perro de rescate de personas sepultadas bajo los escombros fue utilizado por primera vez en Gran Bretaña, durante
El perro en éstos casos un auxiliar esencial, a través de su desempeño con una enorme entrega, coraje y una actitud heroica, muchas veces difíciles de igualar por el ser humano.
El perro de rescate también desarrolla sus tareas en caso de catástrofes ferroviarias o aéreas, o porque no un derrumbe de una mina o una obra en construcción.
Usted se debe preguntar ¿No existen aparatos capaces de detectar ruídos o sonidos de baja intensidad? La respuesta es sí. Pero sucede de que éstos aparatos requieren para su eficaz funcionamiento un silencio casi absoluto, por lo que es prácticamente imposible que se den estas condiciones durante la limpieza de escombros. A diferencia, el perro puede trabajar no solamente ante cualquier adversidad meteorológica, sino también mientras las máquinas utilizadas (grúas, martillos neumáticos o excavadoras) hacen su trabajo causando en el área afectada muchísimo ruido, humo y vibraciones en el suelo y restos de materiales.
Además los perros de rescate no solo encuentran a las víctimas de éstos accidentes sino también indican si la persona que encontraron está viva o muerta, "marcándola" de una manera diferente. Esto aunque incríble pero real. la tecnología electrónica no lo ha podido conseguir hasta el momento.
¿Cómo trabajan?
El trabajo se hace en equipo. Cada integrante del Equipo de Rescate tiene asignado un can, siempre trabajan juntos formando una dupla técnica. El guía conoce perfectamente al perro, y debido a ello sabe interpretarlo entre los escombros, por lo que está totalmente concentrado en sus reacciones y alerta a todos sus movimientos.
En forma recíproca, el perro debe tener una confianza absoluta en su guía, para poder seguirlo a todas partes, cualquiera sean las condiciones del terreno. Esto por supuesto requiere de un entrenamiento físico, acompañado de ejercicios de disciplina (junto, detenerse, etc.), pero está orientado mayormente al rastro, o sea a la búsqueda propiamente dicha. Existen varias técnicas de aprendizaje, pero la más utilizada es familiarizar al perro con algún objeto o juguete, hasta que el can demuestre un entusismo por encontrarlo cuando el hombre (socio en el trabajo) se lo quita de la vista o se lo oculta. Primero el amo, luego una y posteriormente varias personas, se esconden con el juguete.
Cuando el perro lo encuentra "marca" a sus supuestas "víctimas" ladrando y rascando el suelo.
Para obtener su "Licencia de Perro de Rescate" los canes deben rendir exámenes acordes a las modalidades de cada país, siendo el primer requisito, encontrar a varias personas ocultas sin verlas mientras éstas se escondieron (verlas esconderse le facilitaría el encuentro).
Los perros utilizados deben contar con muy buen olfato, ser de carácter y temperamento equilibrados, y mostrar energías suficientes (ganas de trabajar).
Las razas más utilizadas son las que pertenecen al grupo de pastores, especialmente el Ovejero Alemán.
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