Para comenzar con el perro de guardia, debemos aclarar primordialmente muchísimos conceptos erróneos que la gente posee acerca de éste tipo de canes. En primera medida, se cree que el perro adiestrado para guardia es una máquina de morder, que puede llegar a atacar a cualquiera, inclusive a integrantes de la familia con los cuales convive.
Es muy común se me consulte también si va a dejar de ser cariñoso con los dueños. Algunos dicen que no quieren que le enseñe al perro a morder porque tienen chicos de corta edad o bebés. Otros piensan que porque tienen un Ovejero Alemán, un Rottweiler o un Dobermann, tienen en su casa un "tigre de bengala" y nadie les va a entrar: "No, a Sultán no le vamos a enseñar a morder porque después no lo paramos más, el otro día entró el sodero y casi más lo mata, suerte que si estaba yo, que si no..."
Y claro, el sodero permanentemente le demostró miedo a Sultán desde que éste era cachorrito, y entonces el "supuesto perro guardián" está agrandadísimo... con el sodero, el jardinero, el pintor, etc.
Ahora, siguiendo el ejemplo de Sultán (del otro lado de las rejas del frente de la casa todos los perros son "guapos"), pobre si un día Ud. tiene la mala fortuna de que alguien deseee entrar a su casa suponiendo encontrarse con dinero, joyas, etc., y se tope con un verdadero delincuente que está forzando la puerta de entrada, Sultán lo escucha y sale para atropellarlo como hace habitualmente el famoso "tigre", pero sucede algo que no figuraba en el libreto: el malechor entra y cuando el perro lo tiene a su alcance, le pega una patada en las costillas, o le rompe la cabeza de un culatazo con una pistola 9 mm., y entonces... Desapareció el perro guardián!!!.
Otros comentan por ejemplo: ¿Viste el perro que mató al dueño? Y sí, es verdad. Pero en éste caso hay que tener encuenta algunas cosas:
¿Qué trato le dió el dueño desde cachorrito?
¿Lo tuvo siempre atado con una cadena de 50 cm. siempre en el fondo de su casa, lleno de pulgas, garrapatas, etc., y aislado totalmente de la sociedad?
¿Lo castigaba diaria y duramente con un palo de escoba porque ladraba en demasía y molestaba a los vecinos?
¿Alguna vez compartió un paseo con su mascota?
¿Le brindó cariño y compartió juegos con él desde que el perro llegó a casa?
Y seguramente todas o muchas de estas respuestas van a ser negativas, lamentablemente, pero claro, de lo único que se entera la gente es que "el perro mató al dueño". Por favor!!! ¿De qué dueño me habla?.
Todo esto crea una terrible confusión acerca de lo que es un perro de guardia. Por eso me veo en la obligación profesional de aclarárselo.
Un perro de guardia es lo siguiente:
Primeramente, fue adiestrado para obediencia, consiguiendo a través de este entrenamiento, equilibrio en su temperamento, control en su carácter y por sobre todas las cosas, subordinación.
A través de esto, sabe diferenciar una actitud pasiva de una actitud agresiva (no es lo mismo una persona que se detiene a preguntar la hora que una persona que se detiene frente a nosotros y saca un arma de fuego y nos intimida).
Sabe donde tiene que morder, en que situaciones y porqué está mordiendo.
Está atento simultáneamente a las órdenes de su amo, para que, cuando éste se lo ordene, dejar de morder.
Hay que destacar algunas cosas muy importantes, como por ejemplo, que no cualquier perro sirve para "guardia". Debe tener un temperamento equilibrado y un carácter firme y estable.
Que el perro de guardia no es un perro "malo", es un can adiestrado para cuidar al hogar y la familia.
Entrenamiento del perro de guardia
Todo perro de guardia debe empezar previamente con el trabajo de disciplina propiamente dicho. Una vez avanzado en su aprendizaje, o sea cuando el perro se siente subordinado al amo, y tiene claro que él es un integrante más de la familia y no el dueño de casa, se comienza a enseñarle a cuidar el hogar, sus pertenencias y, por sobre todas las cosas, a la familia.
Durante la etapa de obediencia, el adiestrador debe evaluar permanentemente su temperamento y deberá empezar a efectuarle prácticas de desconfianza. Una vez logrado un total control sobre el alumno, se procede a enseñarle a morder.
Lo más importante en éste tipo de ejercitación es que no solamente aprenda a morder, sino también, que se calme y suelte cuando se le ordene. Hay que tener en cuenta que toda la práctica de agresividad desmedida provoca una gran concentración de adrenalina en la sangre de nuestro can e inhibe toda sensación de dolor.
El escenario, el delincuente y la situación en sí de "asalto y violencia" deben ser lo más reales posibles, para evitar todo tipo d confusión de parte de nuestro perro en el momento que se presente un hecho no simulado. El entrenador que esté preparando un can de guardia, debe tener en claro lo que está haciendo, ya que podría provocar en su mascota daños psicofísicos irreparables, por lo que obviamente, éste trabajo debe hacerlo un profesional.
El perro debe aprender a morder a través de su instinto natural "de presa" y además a mantener la mordida firme y sin soltar hasta que, por supuesto se le ordene.
Con un arma de fuego por supuesto con balas de "fogueo", se le realizaran reiteradas pruebas de reacción a éste tipo de detonaciones, empezando desde una distancia no menor de veinte metros, hasta que, se le llegue a disparar a quemarropa.
El perro no debe acusar temor a los disparos, y si así ocurriera estaríamos ante un grave problema, que seguramente se solucionará, pero demandará un tiempo más de lo habitual.
El perro de guardia debe llevarse a pasear a la vía pública siempre con una traílla colocada, jamás lo suelte. Si usted desea sacar a su perro suelto, no puede tener un perro de guardia. Si usted piensa que puede sacar a su perro suelto y que además su mascota sea un excelente perro de guardia, debo informarle que lamentablemente no comparto su concepto.
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